DRAMATICO TESTIMONIO EN “EL DEPORTIVO”

El jugador de Mandiyú Alejandro Pajuerk, confesó que solo come una vez al día

“Nunca es triste la verdad, lo que  no tiene es remedio”, dice una de las más famosas canciones del Joan Manuel Serrat, que describe casi a la perfección el dramático momento que está atravesado el plantel de Mandiyú en el ultimo tiempo.

Consumado el descenso que significo el fin de la gran ilusión para el gigante del nordeste volver a los primeros planos competitivos, la situación comenzó una curva descendente que parece no tener fin. En un club casi acéfalo de conducción, los infortunios explotaron en el plantel.

Primero, una carta dirigida a los medios blanqueaba una situación crítica con respecto principalmente al pago de los sueldos.

20-04-2018


Alejandro Pajurek

Pero, en el programa EL DEPORTIVO DE RADIO CONTINENTAL, el jugador Alejandro Pajurek confesó el drama personal que está viviendo: “La realidad es más que critica, algunos compañeros se han ido, yo opte por quedarme.  El señor presidente (Igarzabal) se acercó cuando termino el campeonato  a darnos plata para que nos vayamos y que en dos o tres semanas iba a llamar para ponernos al tanto de la deuda.  Decidí quedarme para que me cancelen la deuda y rescindir el contrato que tengo firmado hasta junio al igual que todos mis compañeros. Ha pasado casi un mes y sigo en Corrientes y gracias a Dios hay gente buena que me ha permitido quedarme en el departamento”, comentaba a los periodistas Ruben Sotelo, Pepe Miguez, Diego Acevedo y Carlos Zeniquel.

“También tengo una buena familia que banca un poco, la realidad mía es una locura: como una vez al día. Esto no lo hago para dar lastima, esta es la realidad y estoy esperando novedades”, dijo con pesar el futbolista.

“Hace una semana le mande mensajes al presidente informándole de la situación critica de todos, muchos compañeros tienen familia y me cuentan que no tienen para pagar la luz de sus casas, muchos tienen hijos y están rebuscándoselas para comer, de todo esto está al tanto el presidente.

Cuando le pregunte qué posibilidades tenia de cobrar me dijo que iba a tratar de vender una heladera  para tirarme unos pesos (sic)”, describió detalladamente para seguir sorprendiendo con su relato,

“Yo soy bueno y flexible, pero cuando el tiempo pasa sin novedades no me queda más remedio de salir a contar la realidad de lo que estamos viviendo”, sostenia Pajurek.