EX COMBATIENTES TRAS SU VIAJE A MALVINAS

“El reencuentro con las Islas, nos sirvió para curar una vieja herida”

En contacto con Radio Continental Corrientes, el ex combatiente Ángel Flores, habló de su experiencia en el viaje después de 36 años a las Islas Malvinas. En el programa Punto X Punto, y a minutos de haber arribado a Ríos Gallegos, se mostró satisfecho con el viaje. Aseguró que, pisar nuevamente suelo malvinense, y reconocer las antiguas posiciones de combate, fue “una especie de sanidad” para la delegación de los 20 exsoldados.

22-05-2018


Ánge Flores en su regreso de Malvinas


“Reencontrarnos con Malvinas nos sirvió para curar una vieja herida que llevamos desde que terminó la guerra”, expresó Ángel Flores, desde Ríos Gallegos, a minutos de su arribo al Continente, luego de mas de una semana de expectativas y emociones en suelo malvinense. Ex soldado, remarcó que hay un “antes y un después del regreso a las Islas”.

“Pisar nuevamente suelo malvinense, provocó un gran cambio en nuestras vidas, nos liberamos de un viejo dolor, al menos nos sentimos muy aliviados”, aseguró Flores al móvil de Juan Aguirre, por Continental.    

“En el 82 salimos de Malvinas con una derrota, y los que volvimos nos sentíamos culpables de haber perdido, salíamos sin entender que hicimos mal, para tener este nefasto resultado, así, cuando volví al Continente, me sentí disociado, no me sentía completo, como si una mitad mía quedara en Malvinas, al volver a las Islas, me volví a encontrar con mi otra parte”, sostuvo. 

“Todos esto se plasma en este viaje, y se comprueba con qué avidez buscábamos nuestras posiciones, tuvimos la oportunidad de recorrer todas las partes donde estaban apostadas nuestras posiciones, y ese encuentro nos sirvió para curar una vieja herida que arrastramos desde hace 30 años”, añadió. 
“Creo que todos los que estuvimos en Malvinas pusimos todo lo que estaba a nuestro alcance, y por más grande que sea el enemigo, no le teníamos miedo, con lo poco que teníamos, le íbamos a pelear de igual a igual, aun así el sentimiento de culpa queda, porque queríamos aplastar a nuestros enemigos, no queríamos entregar fácilmente la soberanía de nuestras islas”, recordó.

“La historia más conmovedora de este viaje, fue cuando cada uno de nosotros llegaba a la antigua posición de combate, el resto del grupo lo apoyaba, porque ese era el momento de emoción donde se producía nuestro quiebre, en ese momento empezaba para nosotros esta especie de sanidad, todo eso se plasma en las fotos de la delegación, antes de ir a Malvinas, y después, hay mucha diferencia entre los rostros cansados antes de partir, y los rostros aliviados al regreso”, concluyó en el programa Punto X Punto.


Fotos: Carlos Pino