El 60% de los correntinos padeció signos de depresión durante el aislamiento
Es el dato que surge de una encuesta realizada por estudiantes de la Facultad de Medicina de la UNNE con el fin de demostrar el impacto del encierro en cuarentena a nivel psicológico.En comunicación con Continental Corrientes, el estudiante y presidente del Congreso Argentino de Estudiantes de Medicina, Damián Roggnesack, dio detalles del temario tratado en dicho evento, entre los cuales se habló de las consecuencias del encierro en cuarentena por la pandemia del Covid-19.
02-11-2020
“Se nos ocurrió ver como afectaba el aislamiento a la salud mental, realizamos un cuestionario a 384 personas que es el numero muestral para la provincia de Corrientes, que mide a los síntomas depresivos, un diagnostico presuntivo. Lo hicimos a través del Google Chrome y lo difundimos en Facebook, Twitter y en Instagram”, contó.
“Las conclusiones fueron súper enriquecedoras, el 21% de los consultados posee depresión leve, 15.9 % depresión moderada 7.6% depresión grabe, siendo el 56.5% el que posee una depresión mínima o nula. Las mujeres presentaban mayor porcentaje de presentar depresión grave o moderada más que el sexo masculino. La población de 18 a 27 años presentó el mayor porcentaje de riesgo de tener depresión moderada, más que cualquier otro rango etario. Y de depresión leve dos veces más riesgo que otra población”, comentó.
“Para poder hacer el trabajo lo asociamos a la encuesta de aislamiento social percibido para analizar estas variables. A menores de 18 no hicimos esta encuesta, porque necesitábamos permisos. Pero vimos que los síntomas depresivos van de aumento en la cuarentena desde el comienzo de la adolescencia, llega a un pico y bajan a los 40 años. Eso se puede asociar, porque en la adolescencia hay problemas en la escuela, el estudio, los amigos y en los 40 presentan síntomas depresivos por los problemas económicos, familiares y/o ocupacionales. Con la tasa de desempleo y problemas económicos en el país, esto aumenta”, dijo.
“Hay bastante variables que fueron estudiadas: perdida del interés, el 69% de las personas no podían tomar decisiones, no se valoraban a sí mismas, no sentían placer como antes, es interesante todo esto. Son indicios para sus diagnósticos, al final del cuestionario introducimos el número de la Red de Prevención al Suicidio de la Provincia para que la gente pueda llamar y asesorarse en una línea gratuita”, indicó.
“El rango etario fue amplio 18-73 años, con un promedio de 29 años, los datos socioeconómicos no se incluyeron en la encuesta porque iba a ser muy amplio, entonces nos englobamos en los síntomas depresivos”, precisó.
“Los trastornos depresivos llevan a la larga a enfermedades con comorbilidades crónicas físicas como la diabetes, también autoinmunes, o canceres, incluso la OMS dice que para el 2030 la depresión va a ser la mayor enfermedad y así afectara a los índices de mortalidad”, agregó.
“Esta encuesta también arrojó que la gente no descansa se siente más tensa, más inquieta, no se alimenta bien, no puede dormir, también conlleva carga de la comorbilidad. La población se siente más irritable que antes, la gente está cansada, agobiada y el clima laboral no es el adecuado”, agregó.
“La información es buena y a partir de ella se puede hacer algo y no esperar a último momento cuanto aparezcan los casos de depresión y suicidios”, aseguró.