Bebés y niños. Cómo actuar ante enfermedades respiratorias

El médico Blanco explicó que cualquier bebé menor de seis meses que presente fiebre, mocos y tos debe ser evaluado por su médico de cabecera o en un servicio de emergencia, especialmente en esta época de alta incidencia de bronquiolitis. "Para los niños mayores, es crucial observar la fiebre: si lleva varios días o es difícil de bajar y el niño presenta decaimiento, también debe ser consultado por un médico", afirmó. 

El pediatra subrayó la importancia de evaluar el grado de dificultad respiratoria. "Enseñamos a los padres a identificar estos signos. Si un bebé con tos y catarro se alimenta y duerme bien, se trata de un cuadro respiratorio leve. Sin embargo, si el bebé tiene fiebre, sibilancia y dificultades para alimentarse o dormir, el cuadro es moderado a grave y requiere atención urgente." 

Blanco agregó que en casos graves, donde el niño presenta fiebre, sibilancia, dificultades para alimentarse y dormir, es probable que necesite internación, e incluso internación en una terapia intensiva pediátrica. 

Con el aumento de enfermedades respiratorias en la temporada actual, el Dr. Blanco instó a los padres a estar atentos a estos síntomas y buscar atención médica oportuna para evitar complicaciones.