Economía. Como hacer mucho dinero en la Argentina sin trabajar y sin siquiera tenerlo
Todo tiene un precio, incluso el dinero. El precio del dinero es la tasa de interés. Se podría decir que dinero barato es aquel que conseguimos prestado a muy baja tasa de interés. Si conseguimos dinero barato y lo colocamos en otro lado a mayor tasa, lo estaríamos vendiendo más caro y obteniendo una ganancia. Simplemente eso es el carry trade.
01-11-2024
Carry Trade
En general se hace con monedas distintas y el término se hizo popular en los noventa cuando Japón redujo su tasa a prácticamente cero y los operadores de todo el mundo pidieron prestado yenes, compraron dólares, los colocaron a tasa positiva y luego devolvieron los yenes que les habían prestado y se quedaron con la ganancia en el bolsillo. Pero 15 años antes los argentinos ya lo estábamos haciendo y nuestro nombre criollo fue bicicleta financiera.
Bicicleta Financiera
Simplificando: vendemos dólares, los pesos por la venta se depositan a una tasa de interés del 40% del BCRA (hasta un 45% en el caso de comprar la Lecap S14F5). Al año tenemos un 40% más de pesos. El dólar en ese momento a un crawling peg del 2% mensual va a estar un 24% más caro. Compramos los dólares que vendimos primero y sacamos un 16% limpio en dólares (en realidad un poco más si tenemos en cuenta el interés compuesto en todos los casos). Si no tenemos dinero no importa, tomamos dólares al 4% en el mercado y se achica nuestra ganancia a un 12% pero sigue siendo bueno ya que lo estamos haciendo con dinero ajeno y es un 300% más de lo que pagan en el mundo por colocar dinero propio.
Y por si esto fuera poco, nadie dijo que los dólares teníamos que venderlos al valor oficial, haciéndolo vía MEP los vendemos en 15% más caros, con un retorno total de la operación del 31% en dólares (tengamos presente que a nivel mundial es de alrededor del 4% en dólares así que 31% es casi 8 veces más).
Esta ganancia para el especulador obviamente es carísimo para el país, y se debe concretamente al monto de pago de intereses de deuda por el BCRA y por el Tesoro y que es mucho más en términos nominales, que el déficit fiscal tan mencionado. El presupuesto de varios ministerios enteros sumados es menor a éste monto. A modo de ejemplo de la actualidad, es un monto 20 veces más grande a todo el financiamiento de la Universidad pública siendo conservadores.
La bicicleta se puede pinchar
En 1998 Japón subió por primera vez su tasa de interés un poco, los operadores vieron que la fiesta se estaba acabando y salieron muchos de golpe, se hizo un cuello de botella y el yen se devaluó un 16% en un solo día y todo explotó. En nuestro país eso también ocurrió varias veces. En 1976 Alfredo Martinez de Hoz quien había trabajado en la financiera Rosario Finanzas (Rosafin) ya como ministro de economía anunció su “Programa para la Reconstrucción de la Argentina”. Palabras ambiciosas, y cualquier similitud con la actualidad es pura coincidencia. El programa siguió esta secuencia: 1-Liberacion de los precios, 2-Competencia de monedas, 3-Liberacion de importaciones, 4-Quita de retenciones, 5-Liberacion de precios de alquileres, 6-Eliminación de subsidios y planes sociales, 7-Liberacion de acuerdos de salarios y 8-Fuerte toma de deuda con el FMI. Al tiempo, y antes de llegar al punto 8, la economía ya era insostenible y para controlar los precios ideo una tablita. La tablita: basado en el supuesto que el aumento de los precios se debía a “factores psicológicos” propuso la información anticipada de cuál sería la relación del peso y el dólar para cada día y lo publicaba en una tabla (hoy a eso lo llamamos Crawling Peg que queda más cool). Y con tasa y tipo de cambio fijados en 1978 la bicicleta comenzó a rodar. Al tiempo el dinero comenzó a salir de golpe ante el temor de la salida de Martinez de Hoz y una consiguiente devaluación y varios bancos importantes quebraron. De paso, muchos deudores importantes que cancelaron su deuda en el exterior no la declararon al BCRA, en espera de que el estado se hiciera cargo de ella lo cual ocurrió en 1982. Y Entre 1976 y 1982 la deuda externa del país pasó de 8000 a 45000 millones de dólares. En el resto del mundo hacer una operación de carry trade conlleva sus riesgos, como mencioné en el ejemplo de Japón. Pero en Argentina, por lo menos para algunos, la bicicleta no se mancha. Y ahí llegamos finalmente al punto 8 donde las ganancias fueron capitalizadas, y si no alcanzaban los dólares con los del FMI alcanzaron y a otra cosa.
O sea digamos.. ahora va a ser distinto
La última vez que salió la bicicleta a las pistas estaba casualmente Luis Caputo, nuestro actual ministro de economía y fue hace 6 años en 2018. Para ese tiempo también se festejaba que el dólar bajaba al igual que el riesgo país. Se financió en primera instancia con toma de deuda privada a través de nuevas emisiones de bonos en dólares. El más emblemático fue el AC17D con vencimiento en 2117 y más conocido como centenario. Nunca voy a olvidar un titular de New York Times de esa fecha donde se leía: “Argentina is crazy” haciendo referencia a ese bono con vencimiento a 100 años siendo un país que defaultea cada 10. Y llego un día donde los bonos estaban muy caros y dejaron de subir y el riesgo país de bajar. Como en cualquier estafa piramidal ya no ingresaban dólares para financiar al circuito a través de nuevos jugadores privados, pero siendo un país tenés más recursos y aprovechando un Riesgo País bajo se pidió la último gran préstamo al FMI con la narrativa que las tasas eran muy bajas y era una deuda muy barata, etc. Y la bicicleta siguió un poco más. Pero dados los precedentes pedir ese préstamo fue polémico, y así entre otros escándalos en junio de 2018 Federico Sturzenegger sale eyectado como director del BCRA, en esa semana fue que Mauricio Macri dijo “pasaron cosas”. Para renovar la confianza ingresa Caputo que hasta ese momento se desempeñaba en la cartera de Finanzas.
Consumido también esto, el descalabro del dólar, las paridades de los bonos y el Riesgo País fue total, en medio de la corrida Caputo prometió pagar con la emisión de los denominados bonos BOTE (sí sí, ese era el nombre, Bonos del Tesoro BO-TE, ya a esta altura es para pensar que no solo la hacen, sino que hasta les divierte). Y los más desprevenidos se podían salvar con el BOTE23 o con el BOTE26. Finalmente en septiembre Caputo renunció y se fue a tomar sol a Brasil. Y la bicicleta se guardó, pero no por mucho tiempo.
Actualmente y lejos de rendirse Luis Toto Caputo lo vuelve a intentar ahora. Los retornos están, los jugadores son los mismos, pero el destino final del circuito ya es conocido. En general no dura mucho, pero algunos meses más seguro.
Consecuencias para el país
En general la mayoría de los países toman deuda cuando amerita financiar un desarrollo estratégico que involucra varias generaciones. Por ejemplo la construcción de una gran represa hidroeléctrica o un puente como el Zarate - Brazo largo, donde generaciones futuras también se van a beneficiar, por lo que se comparten los costos con ellos y la generación presente. Hacerlo para financiar éste tipo de especulación de la que venimos hablando es injusto, nos trajo hasta acá, y tiene consecuencias nefastas para el país.
Como mencionamos antes la primera vez que se intentó éste circuito a fines de los 70 el país terminó solicitando el crédito stand by más grande que el FMI había otorgado a un país latinoamericano. Y cada vez subsiguiente ocurrió lo mismo.
Actualmente pasaron la deuda remunerada del BCRA al Tesoro con la emisión de Lecaps. Éstas Letras de Capitalización por capitalizar en el momento del pago se registran como aplicación financiera, lo mismo que una amortización y va a todo a deuda contra patrimonio. Por eso no figuran como déficit cuasi fiscal del BCRA ni del Tesoro. Así mágicamente barrieron bajo la alfombra alrededor de $2 billones (millones de millones) por mes y cuando esto termine va a ser muy difícil recuperarse.
El déficit sigue no engañan a nadie.
Matías Tato. Dr. en Economía (UBA). Partido Nueva Generación
Autor: (*)Dr. en Economía (UBA).