Monteverde. "Si se mantiene la actual política económica, la inflación no superaría el 25% anual y un PBI cerca del 5.5%"

Según Monteverde, los primeros meses hasta mayo y junio fueron críticos, describiendo ese periodo como un "enorme esfuerzo" tanto del Gobierno como de la población. "Durante estos meses, la administración Milei implementó transformaciones económicas significativas, enfocadas en un disciplinamiento fiscal sin precedentes y un reordenamiento monetario que recordó la época del Plan de Convertibilidad", dijo.

Monteverde destacó que, si bien la población no pudo ver los frutos de estas medidas de inmediato, la economía argentina tocó fondo y comenzó a estabilizarse a partir de junio. Señaló que "desde julio y agosto, la actividad económica comenzó a mostrar señales de recuperación, desafiando las predicciones pesimistas de muchos economistas, quienes anticipaban un escenario hiperinflacionario y una caída en la actividad económica".

El analista comentó que, después de un periodo de incertidumbre, ya se observan resultados positivos en diversas áreas. "Las ventas en comercios minoristas  mejoraron mes a mes, y el comercio electrónico experimentó un crecimiento formidable," aseguró Monteverde. Además, mencionó que la industria reportó cifras alentadoras, con cinco meses de crecimiento continuo, y la minería y la construcción también están en ascenso.

En cuanto a las perspectivas del próximo año, Monteverde fue optimista: anticipó que, si se mantiene la actual política económica, la inflación no superaría el 25% anual, y se espera un crecimiento del PBI entre el 5% y el 5.5%. Estas estimaciones posicionan a Argentina como uno de los países con mayor crecimiento económico potencial en el mundo para el 2024, cerrando un año con un panorama muy positivo.